¡Feliz Día Mamá!

Quiero dedicar estas líneas  a la mujer que me dio la vida, es para mi una inmensa alegría poder contar con tu presencia y saber que desde que era una bebé siempre has estado a mi lado cuidándome y protegiéndome, eres una madre ejemplar y te admiro por muchas razones, una de ellas es que eres una mujer luchadora que supo salir adelante.

El amor de una madre es incomparable e incondicional, ahora que soy madre entiendo muchas cosas que quizás antes no entendía.

No hay nada más sublime que la mirada tierna, el abrazo protector y las palabras de aliento de una madre. ¡Las madres son maravillosas!

Doy gracias a Dios por regalarme tu presencia en mi vida y solo le pido que te conserve con salud, eso es lo más importante.

¡Feliz cumpleaños mamita querida!

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